En el mundo de hoy es normal ver que una persona salga a hacer alarde de sus hechos, una obra de caridad, un logro alcanzado e incluso el éxito de sus hijos es un motivo para enorgullecerse y reclamar el mérito. Sin embargo, la experiencia nos enseña que es mucho más importante cuando mantenemos un bajo perfil y aun así somos capaces de alcanzar los logros, cuando aprovechamos la ventaja de las sombras para trabajar mientras los demás duermen y así conseguir los resultados más encomiables.
En esta enseñanza, aprenderás que la Biblia está llena de actores de reparto que en realidad vinieron a ser los gestores silenciosos de las hazañas de los grandes protagonistas; si prestas atención recibirás inspiración para luchar cada día por hacer que quienes estén a tu alrededor logren hacer grandes cosas gracias a ti, sin que eso signifique que aparezcas como el foco de las luces.